"Hola"

Se apagaron la luces
y se abrieron las calles.
Miré hacia los lados,
luego hacia el frente y me volví.
Permanecí allí sentado
durante un rato
con la esperanza
de que ella no apareciera.
La contradicción
como modo de vida.

Hace ya tantos años,
hace ya tantas cosas.
A menudo me pregunto
cual sería la primera
de las palabras que le diría
si de nuevo la encontrara.
Esa que sería víspera
de un choque frontal
o quizás
del más tranquilizador
de los abrazos.

Creo que simplemente
pronunciaría un "hola",
y esperaría, como digo,
la feroz embestida de sus brazos,
o tal vez la visión de su espalda
haciendose cada vez más pequeña
en el horizonte,
fotograma a fotograma.
Devolviéndome la maldita indiferencia,
como ese inmerecido regalo
que un cretino de mi talla
le hizo hace ya mucho tiempo.

Estoy más muerto, es verdad,
pero he aprendido.
He aprendido
un millón de cosas
que aún tengo que enseñarme.
Y sé que se borraran sus huellas
y sabré que estoy más solo
cuando ya no pueda recordar
la constelación de lunares de su rostro.

[ D.G. ]